jueves, 23 de septiembre de 2010

ILUSTRACIÓN DE MODAS. UN ANTES Y UN DESPUÉS. 1ª PARTE

Siempre he sentido especial admiración por un área del universo moda que a lo largo de los años ha servido no solo para exponer de forma clara y detallada las Tendencias por venir, proporciones de la vestimenta o estilos que se pondrán de moda a lo largo de ese contagio imitativo que forma parte del ser social, sino también como parte de la personalidad de quien la expone, logrando con los años y a través de un simple trazo, su sello personal.

Hablo de la Ilustración, técnica que a través de los siglos ha logrado irse ganando el lugar que se merece dentro de las artes en general. Y de manera más puntual me gustaría adentrarme en la Ilustración de modas, para ello debemos hacer un viaje en el tiempo para entender su evolución.

La ilustración de modas o figurín de moda como se conocía por aquellos entonces no vio la luz hasta el período Barroco; fue entonces que hacia los siglos XVII y XVIII comienza el proceso de la universalización del traje y surgen los primeros dibujos grabados de modas. Francia y Holanda, inician su “siglo de oro”. También se comienzan a marcar los trajes tradicionales o típicos de algunos países.




Al aparecer los grandes almacenes y una necesidad cada vez mas desmedida de consumir la moda parisina y foránea por parte de la clase palaciega de aquel entonces, se hace necesario hacer llegar de forma más rápida la información correspondiente, es por ello que el ilustrador o figurinista es cada vez más solicitado en las ediciones de panfletos o reseñas en los periódicos más importantes. A partir de entonces el dibujo del figurín de modas se convierte en referente para todas aquellas personas seguidoras de los diversos estilos.

Si bien la pintura ha rescatado a través de los tiempos las costumbres y vestimentas de diferentes épocas, la ilustración se vuelve un medio más eficaz por su rápida respuesta a las necesidades de los clientes, es por ello que se convierte por si sola en el medio de información por excelencia hasta la llegada de la fotografía.

El siglo XIX consolida una serie de adelantos científicos que se venían gestando del siglo anterior, con la aparición del Daguerrotipo (invento precursor de la fotografía moderna creado por Louis Daguerre en 1839) hacen que la ilustración pase a un segundo plano y solo se utilice en mayor medida para bocetar ideas o realizar caricaturas políticas o de farándula. Se despide este siglo con la aparición de las chicas Gibson debido al ilustrador y caricaturista Charles Dana Gibson (1867-1944) quien proponía un nuevo prototipo de la joven estadounidense de desenvoltura cuasi varonil antecediendo así a la vampiresa de los años veinte. Por su parte Charles Allan Gilbert (Estados Unidos, 1873 - 1929), artista e ilustrador nos muestra una mujer más sofisticada, pendiente de su vanidad en medio de ambientes nocturnos, rodeada del glamour de la época.
Charles Dana Gibson. Estas imágenes puede encontrarlas en http://www.glamoursplash.com/2009/01/charles-dana-gibson-old-fashioned-girl.html

Charles Dana Gibson. Estas imágenes puede encontrarlas en http://www.flickr.com/photos/gatochy/266490520/
Gibson Girls, c. 1900. Charles Dana Gibson http://www.flickr.com/photos/lvsutton/2746686972/

Charles Allan Gilbert. Diciembre 10, 1908. http://filboidstudge.blogspot.com/2008_12_01_archive.html

C. Allen Gilbert, 1902. http://filboidstudge.blogspot.com/2008_12_01_archive.html

A principios de siglo XX y bajo la influencia del ballet ruso y la moda foránea de oriente, modistos como Paul Poiret (1879-1944), discípulo de Worth, muestran sus creaciones “modernas”, a través de impresionantes ilustraciones acordes a la estética sinuosa del Art Nouveau. No obstante y con un calibre mucho más alto Gustav Klim nos muestra una mujer de poses lánguidas, relacionada muchas veces con historias antiguas o representando las 4 estaciones. Tanto el cartel para obras de teatros como ilustraciones para cajetillas de cigarros sirven para mostrar a través de un lenguaje rebuscado a la nueva mujer.

La Péri, costume d'Iskander (Vaslav Nijinski) – 1911

Costume de la Péri-1911 Costume du dieu bleu- 1912–Nijinski
L'Oiseau de feu - 1910 - costume de l'Oiseau de feu

Diseños de Paul Poiret

Por otra parte y hacia la década del 20 ilustradores como George Lepape (1887-1971) y George Barbier(1882-1932), este último considerado el ilustrador por excelencia de la moda en el período Art Deco encabeza portadas de revistas con sus figurines lánguidos y llenos de glamur de una década llena de divertimento y relax que culmina en el período de mayor crisis económica en la historia estadounidense.

http://nuxpirata.blogspot.es/1227214260/

Las revistas de la época necesitarán más de una vez de los servicios de estos importantes ilustradores para plasmar en sus portadas situaciones de glamour y relax, de ambientes sofisticados y deportivos, donde el ocio es el protagonista de fondo. El ilustrador español Eduardo García Benito.

En los 40 aparecen las chicas de calendario o mejor conocidas como PIN UP (estética que sobrevivirá toda una década, convirtiéndose en nuestros días en objetos de culto). Sus principales exponentes Alberto Vargas, Rolf Armstrong, Al Buell, Edward D\'Ancona, Harry Ekman, Gil Elvgren, Art Frahm, Pearl Frush, Earl McPherson,Bill Medcalf, Earl Moran, Zoë Mozert, K.O. Munson, George Petty, Edward Runci, Billy De Vorss. Estas mujeres de escasas ropas inundaban los casilleros de los soldados que se alistaban a la guerra y por qué no de todo aquel adolescente que se preciara de serlo, no obstante y tanto o más importantes que las mujeres de carne y hueso. Las ilustraciones de Alberto Vargas (1896 – 1982) y George Petty (1894– 1975) llegaron no solo a formar parte de artículos o portadas de revistas para adultos sino fueron exhibidas con orgullo cual insignia nacional por los pilotos que lucharon en la 2 Guerra Mundial. Aunque es menester reconocer a la inigualable y legendaria Betty Boop como la Pin Up por excelencia.

Pueden encontrer una colección bastante amplia en:
http://www.taringa.net/posts/imagenes/1003234/Dibujos-Pin-Up---Vintage.html


http://www.allposters.com/-sp/Varga-Girl-Posters_i847744_.htm
En la década de los 50, cuando a través de la publicidad se intenta rescatar una economía de posguerra apuntando a un consumismo desenfrenado, admiraremos no solo figurines de modas muy amanerados por cierto, intentando tal vez rescatar la femineidad perdida en los años de guerra, cuando las mujeres sustituyeron a muchos hombres en sus puestos de trabajo; sino ilustraciones de alto calibre, cuasi reales para promover productos comerciales de todo tipo, la idea; olvidar años de penuria y escaseces y consolidar la economía a partir de la generación de necesidades (a veces innecesarias).

martes, 23 de febrero de 2010

El eterno “enfant terrible”


Aún no me cierra que haya muerto, no me cierra, no lo entiendo. Pero quien puede entender la muerte, NADIE, es lo que tal vez sea más triste aún, pues nos quedamos sin respuesta.
Solo atinamos a pensar cuando alguien muere tan joven, convertirlos en leyendas, la desaparición prematura nos obliga: Marylin, Dean, Heath Ledger y más recién Michael Jackson, son algunos de los nombres que me vienen a la mente y seguir sin entender.

Lee Alexander McQueen no escapa a este status, desde hace unos años se adueñó de un estilo irrepetible, un verdadero mago de puestas en escenas conceptuales únicas y magníficas. Recuerdo una colección en especial que me llamó mucho la atención en el 2005; ese fabuloso juego de ajedrez donde cada pieza se lucía por sí misma dando el jaque mate perfecto.
Una de las últimas colecciones ready to wear, otoño del 2009, mostraba una puesta sombía, tal vez como crítica a la contaminación en la que vivimos, de donde emergen mujeres muy estructuradas, cuasi muñecas de otras dimensiones que mostraban diseños con la complejidad misógina y la calidad poética, como solo Alexander, el grande, podría entregarnos; siluetas al mejor estilo new look en algunos casos, donde los niveles de un alto romanticismo chocaban con un maquillaje grotesco marcando un dark extremadamente elegante.

Este hijo de taxista sabía fusionar mejor que nadie moda, concepto y tecnología y sobre todo dar un espectáculo que quedaría en la memoria de todos, uno mejor que otro, siempre creciendo y desafiándose a sí mismo en el intento.

Maestro de la forma, el color y la textura, dueño de una coherencia en sus colecciones muy pocas veces vista en nuestro medio, artista del cuero, llevándolo a extremos que nadie se atrevería a imaginar. Eso es diseño: siempre cuestionamiento, siempre la pregunta ¿por qué no?

Y hablando de preguntas, sin dudas nos haremos muchas en relación a su muerte y presiento que no encontraremos nunca una respuesta que nos satisfaga.

Nos quedará entonces resignarnos a convertirlo, tal vez en contra de su voluntad y la nuestra, en Leyenda.